La inteligencia emocional es la capacidad de reconocer y comprender las emociones en uno mismo y en los demás. Las emociones son una parte natural de la vida. No son algo de lo que debamos avergonzarnos. En cambio, deben ser aceptadas. La inteligencia emocional ha sido definida en términos genéricos como la habilidad de entender, usar y manejar las propias emociones de una manera positiva, y de empatizar al mismo tiempo con los demás.
Enseñar inteligencia emocional a edades tempranas ayudará a los niños a comprender mejor el mundo que les rodea, sus propios sentimientos y los de los demás. Les ayuda a desarrollar empatía por otras personas y les ayudará a tener una vida más plena.
La inteligencia emocional (IE) es una de las habilidades más importantes que pueden aprender los estudiantes. Por desgracia, la IE no se enseña lo suficiente en las escuelas, lo que puede llevar a los estudiantes a tener dificultades en su vida personal y profesional.
Beneficios de aprender a ser Emocionalmente Inteligentes
La enseñanza de la inteligencia emocional en las escuelas tiene muchos beneficios. Cuando los estudiantes aprenden a gestionar sus emociones, son capaces de mantenerse concentrados y productivos en clase. Además, son capaces de controlar mejor sus reacciones cuando se enfrentan a situaciones difíciles. Cuando sean adultos, estos estudiantes serán más capaces de manejar el estrés y trabajar eficazmente con los demás. Los expertos coinciden en la presencia de cinco rasgos determinantes en las personas emocionalmente inteligentes:
Autocontrol: Son capaces de controlar sentimientos y comportamientos impulsivos, tomar la iniciativa y adaptarse a situaciones cambiantes.
Autoconciencia: Reconocen las propias emociones y saben cómo estas afectan a sus pensamientos y comportamientos.
Automotivación: Pueden canalizar las emociones para superar los desafíos cotidianos.
Conciencia social o empatía: Saben ponerse en la piel de los demás.
Gestión de las relaciones: Pueden mantener buenas relaciones con los demás, comunicar claramente, gestionar el conflicto de manera no destructiva, trabajar en equipo, etc.
La educación emocional puede ayudar con las habilidades sociales y las relaciones
La educación emocional es una herramienta que puede ayudar con las habilidades sociales y de relación. Enseña a los niños cómo comprender sus emociones y por qué se sienten de la forma en que se sienten. También ayuda a enseñar a los niños cómo responder a las emociones de los demás y comunicarse de manera efectiva.
La educación emocional ayuda a mejorar su autoestima al reconocer su valor y valía en la sociedad.
La necesidad de educación emocional es más importante que nunca. Las redes sociales y el constante bombardeo de negatividad de los medios han dificultado que las personas se sientan bien consigo mismas.
Con la educación emocional podemos enseñar a los niños a identificar y gestionar sus emociones. También podemos enseñarles a ser más compasivos y comprensivos con los demás.
¿Cuándo es el mejor momento para aprender Ed. Emocional?
Es importante que las personas cuidadoras y profesores recuerden que la inteligencia emocional es una habilidad que se desarrolla a lo largo de toda la vida. Los alumnos no se convertirán en inteligentes emocionalmente de la noche a la mañana, por lo que es importante que los profesores sigan trabajando estas habilidades a lo largo del curso escolar.
Pese a lo que pueda oír ahí fuera, los niños retienen mucho más de lo que nos pensamos. Es muy importante empezar a enseñarles educación emocional desde pequeños. Cada vez que se hacen más mayores es más difícil romper patrones y ya no tienen esa facilidad para absorver el conocimiento que está ahí afuera.
7 ideas clave a tener en cuenta cuando hablamos de Ed. Emocional
1. Implantar la educación emocional en las escuelas puede ayudar a los niños a comprender y afrontar sus emociones, además de enseñarles a interactuar positivamente con los demás.
2. Es importante que la educación emocional se introduzca a una edad temprana, para que los niños puedan aprender lo básico y desarrollar estas habilidades a medida que crecen.
3. Hay muchas maneras diferentes de enseñar la educación emocional, y cada escuela debe encontrar el enfoque que mejor funcione para ellos.
4. Los beneficios de la educación emocional son amplios, e incluyen la reducción del acoso escolar, la mejora del rendimiento académico y el aumento de las habilidades sociales.
5. La educación emocional no debe verse como algo opcional, sino que es una parte esencial del desarrollo del niño.
6. Los padres y los profesores deben trabajar juntos para apoyar el desarrollo emocional de los niños.
7. Abordar la inteligencia emocional de manera transversal en las escuela es mucho más efectivo que realizar talleres puntuales.
Ideas para trabajar la inteligencia emocional en las aulas
No es ningún secreto que la inteligencia emocional es una habilidad vital fundamental. Sin embargo, para muchos estudiantes, la educación emocional es algo que se deja de lado en las aulas. Es una pena, ya que la inteligencia emocional puede enseñarse y aprenderse como cualquier otra asignatura. Hay varias maneras de incorporar la educación emocional en el aula, con beneficios tanto para los profesores como para los alumnos.
Una forma de trabajar la educación emocional en el aula es empezar cada día con una revisión. Esto puede hacerse en grupo, y cada alumno debe compartir por turno cómo se siente ese día. Esta es una gran manera de crear un ambiente seguro y de apoyo en el aula, donde los estudiantes se sientan cómodos compartiendo sus emociones. Además, puede ayudar a los alumnos a empezar a ser más conscientes de sus propias emociones y de cómo afectan a su vida cotidiana.
Otra forma de trabajar la educación emocional en el aula es incorporarla a las lecciones y actividades. Por ejemplo, si se está estudiando historia, se puede hablar de cómo los diferentes acontecimientos pueden hacer sentir a la gente en su momento. Si estás haciendo un experimento científico, podrías hablar de cómo diferentes sustancias químicas pueden crear diferentes reacciones emocionales en las personas. Incorporar la educación emocional a los planes de estudio existentes puede ayudar a hacerlos más relevantes y atractivos para los alumnos.
Por último, es importante modelar la inteligencia emocional para los alumnos. Como profesor, tiene la oportunidad de marcar el tono de la clase. Si es capaz de mantener la calma y el respeto en situaciones difíciles, sus alumnos estarán más dispuestos a hacer lo mismo. Modelar la inteligencia emocional para tus alumnos es una de las mejores maneras de enseñarles esta importante habilidad para la vida.
*Y por último: -Los diarios que más se venden en Amazon.
コメント